Uber está poniendo a prueba un sistema que permite a sus conductores y mensajeros ganar dinero extra realizando "microtareas" para entrenar a la IA, como grabar muestras de voz, subir imágenes o enviar documentos en distintos idiomas. Estas tareas normalmente pertenecen al ámbito de los servicios de etiquetado de IA a gran escala, como Scale AI o Mechanical Turk, pero Uber quiere integrarlas en su red masiva y descentralizada de conductores. La medida podría cambiar la forma en que se entrena la IA y quién se lleva los beneficios. Uber argumenta que puede combinar el trabajo y la generación de datos en una experiencia de aplicación unificada, pero también plantea cuestiones sobre la equidad, la compensación y la clasificación de los trabajadores.